50 gr manteca
1 cucharada de tomillo fresco
1 cucharada de almidón de maíz
4 yemas
sal, pimienta y nuez moscada al gusto
4 claras
azúcar para espolvorear
manteca y pan rallado (para untar en los moldes)
Cortar la calabaza en cubos pequeños y cocinar al vapor o en el microondas hasta que esté bien tierna. Colocar la calabaza en un bol y reducir a puré. Incorporar la manteca y perfumar con tomillo.
Agregar el almidón de maíz. Mezclar. Añadir las yemas, de una en una, mezclando bien luego de cada adición. Condimentar con sal, pimienta y nuez moscada.
Batir las claras a punto nieve y añadirlas a la preparación anterior. Mezclar con movimientos envolventes. Poner la preparación en moldecitos individuales para souflé de entre 8 y 9 cm de diámetro, previamente enmantecados y espolvoreados con pan rallado, ubicados sobre una asadera para horno. Espolvorear con azúcar y cocinar en horno precalentado a temperatura caliente entre 7 y 10 minutos. Retirar. Colocar los moldecitos en una fuente. Servir de inmediato.
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